Por: Mariaide Ramos
Nanchital, Veracruz.
Desde tempranas horas las familias de Nanchital, Ixhuatlán del Sureste y de la congregación de Mundo Nuevo, comenzaron a arribar a los camposantos Tepeyac, Santa Elena, San José y Jardín de los Recuerdos, para visitar las tumbas de sus fieles difuntos en este Día de Muertos.
En el segundo día de las festividades la afluencia en los panteones se notó más, ya que la mayoría de las personas esperaron hasta el 2 de noviembre, para acudir a la tumba de sus familiares para poder limpiarlas, darles mantenimiento y adornarlas con Cempasúchil como lo marca la tradición.
En todos los camposantos se colocaron filtros de sanidad en el ingreso, para salvaguardar a los visitantes de algún contagio de covid-19, asimismo se solicitaba que portarán su cubrebocas en todo momento y respetar la sana distancia.
El Padre Joel irieta Munguía, fue el encargado de oficiar la homilía en el panteón de la congregación de Mundo Nuevo, perteneciente al municipio de Coatzacoalcos. Ahí habló de la importancia de celebrar estas tradiciones y de no olvidar aquellos que ya no están.
COPAL, TAMALES Y CHAMPURRADO NO FALTARON
Las raíces Oaxacaqueñas se percibieron en el ambiente del San José, ya que algunas familias quemaron el tradicional copal y prendieron algunas veladoras para alumbrar el camino a sus fallecidos.
Mientras que en el panteón Tepeyac, se regalaron tamales y champurrado a las personas que llegaron a estar con sus seres queridos.
“No hay que dejar que se pierdan estás tradiciones tan bonitas que México tiene, nuestros fieles difuntos, nos visitan una vez al año y hay que recibirlos como se merecen”, comentó doña Leticia, quien asistió al panteón para visitar la tumba de su esposo.
