Las amenazas han sido por parte de la delincuencia “común”, dice Episcopado Mexicano
Iván Saldaña
12/04/2013 07:56
CIUDAD DE MÉXICO, 12 de abril.- Obispos de México aseguraron que la Iglesia mexicana ha recibido amenazas vía telefónica pero no del crimen organizado sin embargo, de no afrontar el problema de inseguridad, a todos nos tocará ser “víctimas de la violencia”.
En el marco de la 95 Asamblea Plenaria de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), su secretario general, Eugenio Lira Rugarcía, contestó al respecto que este tipo de llamadas son de extorsión, y provienen de la “delincuencia común”.
“Hemos recabado un poquito de información entre los señores obispos, no hemos encontrado hasta ahora ningún nexo entre algunas amenazas recibidas vía telefónica del crimen organizado, incluso las autoridades especialistas en esta materia que han hecho investigaciones han visto que son llamadas de extorsión de lo que yo podría llamar delincuencia común, no la organizada”, dijo.
Por su parte, el obispo de Tehuantepec, Óscar Campos Contreras, aseguró que a la Iglesia le preocupa “profundamente este problema”, por tal motivo incitó a la sociedad en general a combatirlo de fondo recuperando la humanidad perdida.
En este contexto, frente a las estadísticas de la Secretaría de Gobernación donde aseguran que el índice de violencia se redujo en el primer cuatrimestre del sexenio actual, el obispo de Tehuantepec expresó que aunque no tienen un sistema de medición, sí perciben “el dolor, sufrimiento y preocupaciones” de inseguridad en la sociedad.
De igual forma resaltó que la tarea primordial de la Iglesia es “animar la esperanza de la gente y no crear un clima de desaliento”, además fomentar la participación contra la violencia que no proviene sólo del crimen organizado, sino también intrafamiliar.
Durante el penúltimo día de actividades del cónclave de obispos, donde asistieron 132 de ellos y 16 sacerdotes, el Episcopado Mexicano celebró recibir la respuesta del papa Francisco tras enviarle una carta.
El mencionado escrito que la Conferencia del Episcopado Mexicano envió al Vaticano el pasado miércoles tuvo la intención de enterar al obispo de Roma sobre las actividades de la 95 Asamblea Plenaria, y reiterarle respeto, obediencia y fidelidad.
También le confirmaron que el objetivo general de la reunión de religiosos para los siguientes tres años será fortalecer la identidad de la Iglesia “partiendo de la conversión personal y pastoral para contribuir a la transformación de la realidad de México”.
Por medio la Secretaría de Estado de la Santa Sede, el Papa agradeció el gesto de comunicación eclesial y expresó su confianza en los obispos y en la Iglesia mexicana.
“Al poner los trabajos de esa Asamblea en las manos maternas de nuestra señora de Guadalupe, estrella de la nueva evangelización, el Papa imparte complacido a todos los participantes en ella”, contestó el Vaticano.
