Jairo Torres Luria
60minutos.digital
La zona comercial de la villa carece de señalamientos, por lo cual los conductores hacen su voluntad estacionando sus unidades donde mejor les parezca, y pese a estar violando el reglamento de tránsito, esto no pareciera que no lo notan los agentes que llegan a esta villa.
El lugar donde más problemas se presentan es justo frente de la terminal de autobuses de segunda clase, en donde los operadores de las enormes unidades realizan dificultosas maniobras para entrar y salir, ya que a diario muchas unidades ahí se estacionan.
Es un tramo alrededor de 10 metros en donde de un extremo a otro, existían placas en donde se especificaba no estacionarse, pero estas con el paso del tiempo “desaparecieron”, y hasta el día de hoy ninguna autoridad se ha preocupado por volver a colocarlas.
Por la seriedad de la situación, en donde la vida de las personas está en juego, es necesario que las autoridades viales tomen cartas en el asunto y vuelvan a colocar los señalamientos en este lugar y en donde se requiera, pero ante todo que estas las hagan respetar.
En muchas ocasiones las placas de metálicas únicamente están de adorno, debido a que los conductores hacen lo que quieren por la negligencia de las autoridades viales al no aplicar las sanciones correspondientes.
