Por El Bicho Politikón
Desde la cárcel donde se encuentra recluido (Reclusorio Norte), Javier Duarte hizo una llamada telefónica, un Ciro Gómez Leyva atendía en su estudio del noticiero en Radio Fórmula, parecía que tenía muchas ganas de hablar y Ciro lo dejaba decir, explayarse.
Dijo que todo el caso en su contra es una persecución de Miguel Ángel Yunes Linares y su aún empleado Jorge Winckler, que su esposa Karime es inocente (ajá) ya que nunca fue funcionaria pública y que le duele que se metan con su familia, a la que tiene dos años sin ver pero que llama todos los días.
Derivado de la persecución en contra de su esposa, dijo que tuvo que irse a refugiar a Inglaterra, claro, muy austeramente, que nomás gasta 171 mil pesos mensuales para que Karime viva de manera modesta, “no sirvienta tiene”, por lo que ella hace de comer y limpia el departamentito por el que paga 80 mil miserables pesos.
El cómico Duarte dice que la gente piensa que es millonario, pero que en realidad apenas tiene para mantener a su esposa e hijos, gracias, dijo, a sus ahorritos de toda la vida, vaya, hasta ‘se truena los dedos’ de las apuransas que sufre.
Sobre sus triquiñuelas afirmó que le ‘sembraron’ evidencias y que la entonces PGR lo obligó a declararse culpable de los cargos (lavado de dinero y asociación delictuosa), de lo contrario le harían más cargos y se pasaría toda la vida preso… ya sabemos, Duarte, muerto de miedo gritó a todo pulmón que sí, que era culpable.
Y pues le dieron una ‘gran’ sentencia de 9 años, que con las ventajas carcelarias puede cumplir solo la mitad…
Y hablaba y hablaba mientras Ciro consentía, nada de ese periodista que le hace preguntas incómodas a López Obrador, que lo interrumpe, que lo cuestiona, que no le cree… con Duarte estaba la versión dócil de Gómez Leyva (qué tristeza).
Con un “tengo tanto que decir pero no puedo” casi se dio por terminada la ¿entrevista?, me quedé con un dejo de rabia, el tipo se cree inocente y un perseguido, vaya cinismo… me imagino que en la cárcel vive igual de ‘austero’ que su esposa en Londres.
Pues eso.