Tuzos informó que después de haberle realizado los estudios y análisis correspondientes hace unos momentos el Director Técnico de Arqueros presenta muerte cerebral
CIUDAD DE MÉXICO (Lunes 03 de diciembre) .- Tras una semana de hospitalización por sufrir una trombosis cerebral, al ex arquero de los Tuzos y de la selección colombiana le fue diagnosticada muerte cerebral, daño que es irreversible. Con grandes reflejos, una recia personalidad y capacidad de liderazgo, Miguel Calero fue el emblema del Club Pachuca en la última década, al conquistar cuatro títulos de liga y cinco torneos internacionales.
“Después de haberle realizado los estudios y análisis correspondientes hace unos momentos, informamos que el Director Técnico de Porteros del Grupo Pachuca, Miguel Ángel Calero Rodríguez, presenta muerte cerebral. A partir de este momento continuará en Terapia Intensiva bajo medidas de soporte vital”, informó el club hidalguense mediante un comunicado.
Esta tarde, Calero tuvo una retrombosis y enfrentó el punto más trágico desde su hospitalización, el cual a la postre provocó la muerte cerebral, también llamada muerte encefálica, que se define como el cese completo e irreversible de la actividad cerebral.
Así lo dio a conocer el médico de Pachuca, José Antonio Torres, quien fue el encargado de dar la noticia a los medios de comunicación.
“Con respeto a la familia informamos que después de hacerle exámenes exhaustivos que consistieron en electrocardiograma y algunos otros estudios de imagen, el cuerpo médico comandado por el doctor Edgar Nathal, Marco Centeno, Jaime Lee y nosotros oficialmente con mucha tristeza comunicamos que Miguel Calero presenta muerte cerebral.
“Como una cuestión legal siempre se tiene que realizar ciertos estudios para poder decretar este estado patológico. A partir de este momento Miguel Calero será tratado con vías de soporte vital en la unidad de terapia intensiva de este hospital (Médica Sur)”.
En septiembre del 2007, el guardameta cafetalero ya había sufrido una trombosis venosa en su brazo izquierdo debido a una vieja operación.
Esta dolencia lo mantuvo fuera de las canchas por más de un semestre y, a la postre, obligó su retiro de las canchas. En ese entonces estuvo a punto de perder su brazo.
Su legado
Nacido en Ginerbra, Valle de Cauca, Calero fue todo un símbolo en la época dorada del Pachuca. Su estampa de gigante, casi siempre coronada con una gorra era sinónimo de carácter y seguridad bajo los tres postes; con los Tuzos jugó 8 años y disputó más de 300 partidos. En ese tiempo se proclamó campeón del futbol mexicano en cuatro ocasiones, en los torneos de Invierno 2001, Apertura 2003, Clausura 2006 y 2007. Además, conquistó el máximo título internacional obtenido por un club nacional, la Copa Sudamericana 2006; un tricampeonato de la Confederación de Futbol de Norte, Centroamérica y el Caribe (Concacaf), y la primera edición de la Súperliga Norteamericana.
El ‘Cóndor’ participó en tres mundiales de clubes antes de retirarse en el torneo Clausura 2011, ante Pumas, equipo contra el que perdió la última final que disputó como profesional, aunque su despedida sólo sería el principio de una nueva fase en su carrera.
Pachuca nunca se resignó a perder a una de las máximas figuras de su historia a pesar de su decisión de retirarse, los Tuzos contaron con él dentro de su proyecto deportivo, incluso la semana anterior fue promovido a entrenador de porteros en el nuevo cuerpo técnico que comenzaba a encabezar Gabriel Caballero, quien asumió el cargo tras el despido de Hugo Sánchez.
Con su selección levantó el título de la Copa América 2001.