Distrito Federal— El secretario de Educación Pública, Emilio Chuayffet, acusó a la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) —sin mencionar su nombre— de hacer un ejercicio sistemático de descalificar a las instituciones educativas al afirmar que se vendió la Evaluación Nacional de Logro Académico en los Centros Escolares (Enlace) “sin presentar pruebas”.
Aunque los integrantes de la CNTE y, en particular, el líder del magisterio en la sección 9, Francisco Bravo, corroboraron en varias escuelas que los exámenes que se vendieron en el mercado son los mismos que distribuyó la Secretaría de Educación Pública (SEP) dijo que es una “lástima” que no ha visto pruebas.
“Yo estoy diciendo lo que veo. Hace un año (Francisco Bravo) dijo lo mismo y no presentó pruebas. Hoy dice lo mismo, y no presenta pruebas. Pareciera que es un ejercicio sistemático de descalificar a las instituciones educativas sin comprobar nada al respecto”.
Entrevistado luego de inaugurar la 12 convención nacional de la American Chamber of Commerce of México, el funcionario manifestó que Enlace se realiza con “mucho éxito” en todos los estados, a excepción de Oaxaca. Reiteró que es un ejercicio que tiene más que un propósito de calificación del estudiante, un objetivo de análisis y de evaluación del Sistema Educativo Nacional.
No hay pruebas para quien no las quiere ver: CNTE
El líder del magisterio disidente en la sección 9 de la capital del país, Francisco Bravo, respondió al secretario de Educación, Emilio Chuayffet, que “no hay pruebas para quien no las quiere ver”.
“Es totalmente falso” que no existan evidencias de que esa evaluación se vendió en el mercado antes de su aplicación y que no se haya corroborado que esas copias que circularon en la víspera “son exactamente las mismas”.
Así, el dirigente preguntó al secretario si también descalificará a los padres de familia y a los maestros de grupo que, como él, ayer constataron que los exámenes que distribuyó la SEP son iguales a los que se expendieron.
Por si esto no fuera suficiente, le manifestó toda su disposición para presentar las pruebas a las que hace alusión en la propia sede de la dependencia federal. Si los maestros no acudieron ahí para entregar estas evidencias fue porque las puertas de la SEP “han estado cerradas” para los profesores.
Francisco Bravo recordó que, además, la comprobación de que los exámenes distribuidos por la institución y los que se vendieron son iguales quedó asentada en las actas de incidencias del examen, en donde también estuvieron presentes las autoridades escolares como los directores, así como los aplicadores, los maestros y los padres de familia.
