Xalapa, Ver., 27 de julio de 2014
Hace 22 años la ciudad de Tizimín, Yucatán, vio nacer a una de las fuertes promesas que tiene el tiro con arco mexicano, Pedro Vivas Alcalá. El arquero vive un sueño: competir en el más alto nivel de su disciplina en el país.
Además, volver a ser aspirante a ganar medallas en competencias internacionales, como en los Juegos Deportivos Centroamericanos y del Caribe (JCC) Veracruz 2014.
Vivas Alcalá conoció de muy pequeño el primer amor y fue hacia este deporte, en aquel entonces, poco popular entre los aficionados mexicanos. “Pero en mi ciudad se abrió un centro regional que traía deportes diferentes a los que todos están acostumbrados, aparte del futbol, beisbol, basquetbol y softbol se abrieron otros como luchas, tiro con arco, tenis de mesa y atletismo”.
Así que aquel Pedrito de nueve años hizo click al ver esa prueba que le recordaba a uno de los bandidos históricos en la literatura: Robin Hood. “Entonces con esa historia y de niño entré al deporte y aquí estoy”. Los logros vinieron rápido. Apenas tenía un año entrenando y ya había ganado preseas nacionales.
Con su arco recurvo, fue reconocido como el quinto deportista mexicano con el mayor número de medallas en los pasados JCC Mayagüez 2010. El oriundo de la también conocida como Ciudad de Reyes obtuvo oro por equipos, plata en 70 metros, en Recurvo y en FITA, además de bronce en 50 y 90 metros.
Con casi 14 años en esta disciplina, voltea al pasado y ve los escollos naturales de la vida que lo han hecho superarse. “Cuando algo te gusta no importa qué tanta gente lo siga o esté ahí, sino hay que entrenar fuerte y demostrar que tienes capacidad, tus habilidades con el arco y la flecha; eso fue lo que me motivó mucho, al igual que el apoyo de mis papás”.
Como es una regularidad en los atletas de alto rendimiento, la gran parte del año Pedro la vive fuera de casa. Está ocho meses concentrado, entre competencias, campamentos y viajes; cuando tiene su espacio fuera de la arquería el yucateco se dedica a estudiar. Cursa la licenciatura de Psicología en la Universidad Anáhuac Mayab.
“Cuando estoy en Mérida, aparte de que entreno voy a la escuela, las clases son presenciales, pero uno trata de ponerse de acuerdo con los maestros, a ver qué tanto te pueden apoyar. En mi caso, yo represento a mi universidad en el deporte”.
Tras superar sus compromisos con el tiro con arco y con su escuela, Pedro Vivas aprovecha al máximo el poco tiempo libre que le queda al año. “Trato de descansar, relajarme, leer, ir al cine, escuchar música y estar en casa con la familia los fines de semana”, concluyó el arquero que podría estar calificado este lunes a la Copa del Mundo de Polonia y a Veracruz 2014.
