Eduardo Hernández Castro / El Economista
El futbol mexicano le lleva de ventaja 30 años al de Nueva Zelanda y hasta 25 veces más en sus ingresos comerciales. Las diferencias no sólo quedaron en evidencia en el partido de ida, donde México se impuso 5-1 a los oceánicos y casi amarró su pase al Mundial; también en la infraestructura, arraigo, popularidad y logros en el deporte, que han hecho que el balompié en la isla esté, apenas, en desarrollo.
Hasta esta instancia ha llegado la Selección Mexicana de Futbol, donde dos equipos muy diferentes se enfrentaron en busca del último boleto al Mundial de Brasil 2014. El Tri -que está en proceso de matizar la peor eliminatoria mundialista de su historia con apenas 36.6% de efectividad- enfrenta a un equipo que destina 4.5 millones de dólares anuales para el futbol.
En la cancha, las diferencias también existen, ya que su futbolista con más apariciones hasta hace poco tiempo no tenía equipo. Ivan Vicelich es el defensor de 37 años que estaba encargado de marcar a Oribe Peralta en el partido de ida, pero que en los dos goles que anotó el delantero de Santos quedó en evidencia. El futbolista participa en la liga semiprofesional de su país, con Auckland City, entrenando por las mañanas y atendiendo su tienda de artículos deportivos por la tarde.
El Programa de Desarrollo Humano de la Organización de Naciones Unidas revela que Nueva Zelanda es el sexto país con mejor calidad de vida en el mundo, el ingreso promedio anual alcanza 30,000 dólares; México se ubica en la posición 61 con un ingreso promedio de 10,000 dólares anuales.
El futbol es más caro, en proporción con los ingresos, para los mexicanos. Los neozelandeses pagaron en promedio 843 pesos por presenciar el partido de vuelta de la reclasificación mundialista, es decir, que un kiwi destina menos de un día del salario mínimo para presenciar los partidos de futbol de su Selección. Según la ley del país oceánico, el ingreso diario mínimo equivale a 110 dólares (1,197 pesos mexicanos). Un mexicano tuvo que gastar 5.3 veces el salario mínimo del país para presenciar el partido de ida de la repesca. El boleto promedio en el Estadio Azteca ascendió a 347.8 pesos.
Los kiwis destinan la misma cantidad del precio promedio para el futbol en nuestro país, pero para un boleto de localidad media para el rugby, el deporte nacional en la isla.
¿QUÉ TAN IMPORTANTE ES EL FUTBOL EN NUEVA ZELANDA?
En el país oceánico, el futbol es el cuarto deporte en importancia. Desde hace poco más de 10 años los kiwis han comenzado a establecer planes de trabajo para el desarrollo del deporte y, ante la salida de Australia para competir con los países asiáticos, Nueva Zelanda heredó el lugar de potencia en la zona.
En una década, los all whites ganaron 12 de los 25 torneos regionales, tomando en cuenta eliminatorias mundialistas, torneos preolímpicos, campeonatos de la Confederación de Oceanía y torneos clasificatorios a mundiales juveniles.
La presencia de equipos neozelandeses en competencias internacionales se ha vuelto habitual, han asistido a los dos últimos torneos olímpicos de futbol, a los últimos cuatro mundiales Sub-17 y a tres Sub-20; su máximo orgullo es haber sido el único equipo invicto del pasado Mundial, Sudáfrica 2010.
“El futbol en Nueva Zelanda no es lo que era antes, en los últimos 10 años está aumentando la audiencia. Es un honor formar parte de la Selección porque más gente prende sus televisores para verlos; incluso hasta dejan de trabajar para seguir los partidos”, mencionó a El Economista Michael Anderson, miembro de la Junta Directiva de la Asociación de Futbol de aquel país.
No es un secreto que el rugby es el deporte más importante para los neozelandeses, donde son potencia y han conquistado dos veces el Mundial de la disciplina. “Es nuestra obsesión nacional, creo que México tiene la misma pasión para el futbol”, expresó Clare Kelly, embajadora de la isla en nuestro país.
Y es que, mientras la Asociación de Futbol de Nueva Zelanda tiene un presupuesto de 4.5 millones de dólares al año, la Federación de Rugby opera con 82 millones de billetes verdes. Los all whites ingresan por patrocinios 1.2 millones al año, mientras que los all blacks (rugby) firmaron, en el 2012, un acuerdo con la aseguradora AIG por 492 millones de dólares por seis años, es decir, sólo el patrocinio le asegura el presupuesto anual para el organismo. Al final del ciclo 2011-2014, la Federación Mexicana de Futbol ingresará 250 millones de dólares y la neozelandesa no más de 10 millones de dólares.
El máximo rector del futbol en la isla, en su plan de desarrollo del futbol 2013-2015, consultado por este diario, informa que el principal objetivo del organismo es optimizar los recursos para el desarrollo del futbol base,la difusión del deporte en el país y la organización de ligas regionales para que más niños se interesen por el deporte.
“El futbol se ha vuelto muy popular, ahora hay más niños practicando futbol que rugby”, añadió el directivo del futbol neozelandés. “Los padres están pensando en el futbol como una buena opción para sus hijos, hay gente que se preocupa por las heridas del rugby”, ratificó la diplomática.
En la sociedad neozelandesa, la opinión generalizada es la oportunidad de enfrentar a México para la difusión del deporte. Más allá del resultado y donde -aseguran- los mexicanos son favoritos para asistir al Mundial, los encuentros son parte del aprendizaje que debe tener el país para crecer en el panorama futbolístico, por lo que el partido será transmitido a nivel nacional.
Y, por supuesto, consolidar un torneo que tiene a ocho equipos -seis de ellos con estadios propios- y una capacidad de aforo promedio de 10,500 espectadores. “Un jugador dentro de un club de Nueva Zelanda gana en promedio 1,000 dólares anuales. No es como en México que ya es una gran industria”, indicó Michael.
Un futbolista en la isla gana 30 veces menos que el ingreso mínimo en su país. En México, el ingreso medio de un jugador es de 210,000 dólares y desde 1970 el futbol se tomó como una industria que puede generar muchos ingresos.
¿QUIÉN GANA MÁS POR IR AL MUNDIAL?
El futbol se hizo industria desde el momento que Televisa ingresó al balompié. Para el hexagonal final de la Concacaf, en promedio, cada partido del Tri fue visto por 37.6 millones de personas, según datos de Ibope que dio a conocer la televisora TVC Deportes.
La Selección Mexicana fue capaz de reunir en los 10 partidos de la eliminatoria, tomando en cuenta las audiencias de Televisa y TV Azteca, 376 millones de televidentes. En cuanto a la asistencia al estadio, los seis partidos como local, incluyendo el duelo ante Nueva Zelanda, reunió a 458,826 aficionados, lo cual generó 235.7 millones de pesos.
A todo eso se le sumarían los 250 millones de dólares que ingresó la FMF por los acuerdos comerciales en el ciclo mundialista. En total, la industria de la Selección Mexicana de Futbol, tomando en cuenta los ingresos anteriores, asciende a 268 millones de billetes verdes y 377 millones de personas que vieron los partidos del Tri.
Según datos del reporte de audiencia del Mundial de Sudáfrica 2010, México está entre los 10 países que más televidentes aportaron en la justa pasada. Tres de los 20 partidos con más audiencia en el mundial africano los protagonizó nuestro país, suceso que sólo Brasil y Argentina pudieron igualar.
México representó la tercera parte de toda la audiencia de América del Norte que observó el Mundial del 2010 y al menos siete de cada 10 personas en el territorio nacional vieron un partido del Mundial.
En Nueva Zelanda la cobertura del torneo fue mayor, pero la preferencia de la afición no. La segunda participación de la isla en un Mundial fue trasmitida por la cadena pública del país, TVNZ.
Sólo 34% de la población total de Nueva Zelanda observó algún partido del Mundial y la audiencia media de los partidos de su Selección alcanzó 175,000 televidentes; la final entre España y Holanda la vieron 376,000 neozelandeses.
En la eliminatoria, los kiwis en sus tres partidos como local tuvieron sedes diferentes y en total reunieron 27,600 espectadores, según los reportes oficiales de FIFA. La ocupación de la afición fue de 38.4% de la capacidad total de los estadios. “Es uno de los partidos más importantes para la Selección Neozelandesa; lo importante no será jugar, sino jugar y adquirir experiencia”, explicó la Embajadora.
México está en esta instancia en busca de salvar su estatus perdido en la zona y dirime calificar al Mundial ante el país que tiene apenas una década de experiencia en el futbol. Para Nueva Zelanda su proyecto más importante será llegar a segunda ronda en el Mundial Sub-20 del 2015, del cual son sede, y, a partir de ahí, cimentar las bases para el futuro del deporte.