Solo hay que saber esperar, y entender
El porqué de las cosas.”
Los tópicos y los valores que se deben de fomentar desde la raíz familiar en su seno, se han perdido en la mayoría de las familias, ahora vemos como un pequeño le habla de tú a su madre y a su padre, contesta de manera soez y beligerante a un cuestionamiento de un adulto, en mis tiempos de joven, fue educado a la antigua, con una rigidez que no era común, por mi padre fue todo para mí, es decir existía solo la figura paterna en mi caso ya que quede huérfano a los dos años de vida al fallecer mi madre, fue entonces mi padre quien me enseño que es más importante ser leal, amigo y franco, que tener muchos en pesos en la bolsa.
Por ello hoy, hago esta columna, para recordar que, la amistad, que incluye todos los valores que como seres humanos debemos de tener, aún recuerdo las palabras de mi padre, hombre sabio y pensante, le comente el día que cobre mi primer salario, en el camión urbano en el que viajaba de regreso a casa me lo habían robado, a lo que mi padre respondió, “…Jorge hijo mío, si has perdido el dinero, nada has perdido, pero si has perdido el honor, algo has pedido, pero si has perdido el valor todo lo has perdido…”
Una reflexión para llamar a los seguidores del suscrito a pensar en que si educamos a nuestros pequeños con esa intensidad de antes, quizá rescatemos mucho de los valores perdidos, que es el flagelo que atañe y permea en nuestra sociedad actual, la mayoría de los jóvenes que se encuentran inmersos en problemas de cualquier tipo es, por la falta de orientación o de una figura que los lleve por el buen camino, un llamado a nuestros adultos para, con ellos formemos jóvenes educados, firmes, leales, amistosos y convincentes, se forjen en sus estudios como eficientes, eficaces, excelentes y buenos hombres de bien.
A todos mis seguidores en las redes, a los que opinan igual que yo dentro del mundo basto de las leyes, a los estudiantes, a las personas que han confiado en este ser humano y en el conocimiento de la ley que tengo, hoy doy las gracias, por permitirse ocupar unos minutos a leer los espacios y comentarios que su servidor publica en las redes, no digo adiós, pero si un hasta luego, satisfecho de las publicaciones y comentarios de todo tipo que me templan el alma como persona y como profesional, vivo eternamente agradecido con la vida y la experiencia que hoy me da, agradezco el tiempo de mi familia y de mis cercanos amigos y colaboradores, es tiempo de tomar otros rumbos, GRACIAS, hoy se cumplen cinco años de escribir en las redes, lo cual dejare de hacer por el momento. Reitero muchas gracias.
