Las Choapoliticas

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Por: Juan Manuel Jiménez García.

EN EL ÁREA RURAL LA VIDA NO VALE NADA.

Parafraseando aquella canción de José Alfredo Jiménez “la vida no vale nada”, podemos aplicarla a lo que sucede todos los días en cientos de comunidades rurales del municipio de Las Choapas, y un claro ejemplo de esto, fue la muerte de Alberta, un niña de 15 años de edad que se encontraba embarazada.

Pese a lo que se pregona, todavía existen poblados que carecen de los servicios básicos como es la salud, la falta de clínicas y medicamentos  contribuyen a  los cientos de muertes que suceden en esa zona y que por regular les acontecen a los más pobres.

Ya de por si es fuera de lo común que una niña de 15 años se embarace, cuando lo ideal sería que en esos momentos  estuviera cursando sus estudios de secundaria o preparatoria, pero sabemos que en la extensa zona rural, esta práctica de casar a los hijos casi siendo unos niños es común y que esto se da en ocasiones por tradiciones ancestrales.

Hasta ahí, todavía vamos bien, pero llegamos al punto donde varios factores se unen para ocasionar una tragedia, desde luego que la pobreza siempre arrastrará fantasmas de desgracias, la ignorancia es otro indicativo de estos tristes sucesos y el menos grave pero que también contiene su dosis de dolor es la falta de oportunidades para esta gente del campo.

Alberta murió no por los intensos dolores que sufrió durante dos días, ni por la fiebre que le ocasionó convulsiones, por esos motivos no perdió la vida, Alberta la mató el sistema, ese sistema viciado que ha permitido que gente como la menor de 15 años no tenga la mínima atención médica.

 A Alberta la mató la indiferencia de un gobierno que prefiere realizar obras de relumbrón que invertir en clínicas rurales, y aquí nadie se salva, porque los tres niveles de gobierno están cortados con la misma tijeras, es decir les vale que una niña muera por falta de servicios de salud, pero les vale más si esta niña es una humilde campesina.

Seguro que se lavaran las manos diciendo que la familia de esta joven no llevó un seguimiento de su embarazo, que no tuvo la alimentación adecuada, que las condiciones donde habitaba no eran las idóneas para un sano desarrollo de su gestación, pretextos y más pretextos en vez de asumir su responsabilidad.

La muerte de Alberta tiene que llamarnos a la reflexión, no solo es la manera y las condiciones en las que se dieron su muerte, sino la poca sensibilidad que mostramos como sociedad, no basta escribir un comentario en las redes sociales, falta hacer mucho más que eso, no podemos permitir más casos como la de esta niña.

Que la pobreza de algunas comunidades rurales no sea sinónimo de injusticias, que la pobreza de Alberta no sea sinónimo de indiferencia…hoy es Alberta mañana quién?

TODOS QUIETOS.

A pesar que el próximo año se realizaran elecciones para elegir al presidente de la república, gobernador del estado, diputados federales y locales, el ambiente político en el municipio se encuentra en una calma que presagia una tormenta por los intereses que estarán en juego en el 2018.

Y contrario a lo que se pensaba el candidato o los candidatos del actual mandamás de Veracruz, no la tendrán tan fácil, y no es para menos ya que la administración de Yunes Linares, ha dejado mucho que desear sobre todo en la seguridad que prometió en campaña y que fue una de sus banderas para convencer al electorado.

Algo tendrá que hacer el gobernador si quiere o pretende que su retoño siga sus pasos, de lo contrario puede irle mal en los comicios, por lo pronto la detención de Javier Duarte de Ochoa no ha tenido los resultados esperados en cuanto a los bonos de su gobierno.

Pero no solo es el gobernador que tiene problemas para el año que viene, el PRI se encuentra en uno de sus niveles más bajos de aceptación, y si no logran conjuntar todas las instituciones y las bases que le permitió mantenerse en el poder por muchos tiempo, debe de olvidarse por un buen tiempo de ser otra vez gobierno.

La pelea es pareja, porque tampoco MORENA esta como para ganar la gubernatura, y en parte al pésimo trabajo de Manuel Huerta Y Cuitláhuac García, que  en poco tiempo hicieron que muchos simpatizantes del movimiento quedaran decepcionados y prefirieron mejor sumarse a otras fuerzas.

El 2018 está a la vuelta de la esquina, se espera que al menos en el de estado de Veracruz sea la madre de todas las batallas, donde se verán sorpresas y patadas debajo de la mesa y sino al tiempo.

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