*“Que dejen simplemente a mi papá libre, no vamos a tomar represalias sobre nadie”.
* La unidad que manejaba fue localizada en Antón Lizardo, también encontraron algunas de sus pertenencias y rastros de sangre en la cajuela.
El pasado jueves 31 de agosto, a las 9:40 de la noche fue la última vez que Ángeles Escobar convivió con su padre, el señor Rafael Escobar Toral de 64 años de edad.
Se dirigió al Edijo Primero de Mayo a entregar el taxi que trabajaba sin embargo ya no regresó, narra una de las hijas, Ángeles Escobar.
“Aproximadamente como a las 10:30 de la noche se le vio por la colonia Ejido Primero de Mayo donde fue a ver a su patrón para entregarle el dinero de la cuenta ya que el taxi no pertenecía a él, después de eso se esperaba que regresara a mi casa entre las dos y media y las tres y media de la mañana como normalmente lo hacía, dieron las 4 de la mañana y ya que no llegaba se le estuvo marcando a esa hora hasta el mediodía del día siguiente”.
A seis días de desaparecido, piden a quien privó de la libertad a su padre que lo liberen, sin represalias ruegan bendiciones para quien lo haya hecho.
“Que dejen simplemente a mi papá libre, no vamos a tomar represalias sobre nadie, no queremos saber ni siquiera quien fue”.
“Lo único que queremos es que pongan a mi papá en un lugar en el que podamos verlo para que nadie sepa nada y los bendecimos desde el momento en el que ellos lo hicieron hasta sus generaciones futuras y lo que le sigue”.
Comentó que en su búsqueda acudió al Semefo pero no estaba ahí, reportó la desaparición al número de emergencias 911, quiso activar la Alerta Amber pero le dijeron que no era posible hasta cumplir 72 horas de haber desaparecido la persona y posteriormente pusieron la denuncia.
Para las 5 de la tarde, ya habían localizado la unidad que manejaba en Antón Lizardo, también encontraron algunas de sus pertenencias y rastros de sangre en la cajuela.
“Se encontraba en Antón Lizardo, cerca de la colonia Viveros en la subida hacia el panteón, cerca del campo de béisbol, estaba a medio camino con la trompa hacia delante, la cajuela semiabierta y unas cosas ahí que se encontraban”.
“Se encontraron sus zapatos, fuera amarrados, como si los hubieran ocupado para maniatarlo ya fuera de las manos o de los pies, se encontraron huellas digitales, en encontró una playera blanca tipo polo en el asiento de atrás, y se encontró arena de mar, se encontró rastros de sangre en la cajuela”.
Comentó que los peritos tomaron las muestras de sangre pero no les dijeron cuando estarían los resultados, Ángeles Escobar asegura que pidió muestras de la sangre para analizar por su cuenta pero se la negaron y les negaron acceso a cualquier evidencia.
Agregó que dentro del vehículo habían rastros de lucha en distintas partes del automóvil que más tarde fue remitido al corralón en Playa de Vacas.
“Se veían igualmente rastros de lucha dentro del vehículo ya que se veían como manotazos aislados en los parabrisas, en el tablero, en el volante se veía hubo lucha dentro del auto”.
Comenta que el taxi estaba semidesmantelado, en el lugar donde fue hallado encontraron el RFC del dueño del taxi tirado.
“No estaba la llanta de refacción, no estaban las bujías del carro, no estaban los cables de la batería, no estaba la batería, faltaba el ventilador del radiador, los ventiladores del clima, la bobina”.
La denuncia fue puesta en la Fiscalía Regional de Veracruz, ubicada en la carretera federal Veracruz-Xalapa.
Desde aquel día en que Rafael Escobar no regresó a su domicilio, las hijas emprendieron la búsqueda en redes sociales, mediante manifestaciones y otros medios y aseguran que no se rendirán.
“Vamos a seguir buscando y seguir haciendo ruido, esto no se va a quedar impune, tal vez muchas otras personas se hayan quedado calladas pero nosotros”.
