Villa Cuichapa, Ver.
Redacción.
Muchos problemas han ocasionado las recientes lluvias a los productores ganaderos de la región sur, esto va desde la inundación de grandes extensiones de tierra en sus ranchos, así como el daño en los caminos de terracería que diariamente utilizan para llegar a estos, los cuales representan peligro.
En un recorrido realizado en ranchos colindantes entre los municipios Las Choapas, Moloacán y Minatitlán, se pudo notar como miles de hectáreas fueron inundadas por las intensas lluvias, muchas de estas a consecuencia del desborde del río Uxpanapa.
Por ello, los productores ganaderos han tenido que poner en marcha algunas medidas, como llevar su ganado a puntos altos para evitar que se queden atrapados en la inundación y sea prácticamente imposible sacarlos de ahí.
El exceso de agua impide que el pasto crezca, por lo que los ganaderos, quienes se quejan del olvido en que las autoridades superiores los tienen, deben hacer un gasto mayor para adquirir lo necesario con lo que puedan alimentar a sus animales.
Hasta el momento no se ha precisado el número de reses que han muerto a causa de la inundación en este sector, lo cual representa importantes pérdidas para los propietarios.
Además de lo anterior existe molestia entre los ganaderos debido a que requieren transportar sus reses a otros puntos en donde estén seguros, sin embargo la mala condición de los caminos se los impide, incluso los expone a sufrir un accidente.
Un ejemplo de esto es el camino de terracería que conduce al Polvorín del municipio Moloacán, el cual se conecta con la carretera Cuichapa-Pueblo Viejo; en este, un puente colapsó a consecuencia de la creciente de un arroyo.
Este camino es utilizado por productores ganaderos de los municipios Las Choapas, Minatitlán y Moloacán, así como por familias que viven en localidades cercanas, por lo que esperan la intervención de las autoridades pertinentes para su pronta reparación.
Mientras tanto las mismas personas han colocado costales llenos de tierra y algunos tubos, para que puedan seguir transitando pese al riesgo que representa.
La molestia se hace mayor, ya que desde hace más de 30 años se construyó el Polvorín, el cual almacena miles de toneladas de explosivos, pese a esto a las autoridades competentes no les ha importado mantener en buenas condiciones esta vía de comunicación que también es la única ruta de escape, que luce llena de hoyancos.
Ante esta grave situación los productores ganaderos, así como familias esperan la intervención de las autoridades para que se aboquen a resolver un poco de tantos problemas que diariamente y desde años atrás vienen sufriendo.
